• La Casa de James Norman May. Evoca los grandes momentos de la vida de este heroe de la I Guerra Mundial, aventurero, poeta y escritor sobresaliente de la literatura contemporánea norteamericana (con guías perfectamente bilingües y conferencias organizadas previa petición).
• La garganta del Tahana y su mesa de orientación. Situada en la parte norte, la garganta ofrece la vista panorámica de la costa hasta Papeete y la silueta montañas de Moorea dibujándose a lo lejos. Mejor para la puesta de sol.
• El museo Paul Gauguin. Una retrospectiva excepcional en homenaje a la vida y obra de este famoso pintor...
• El Museo de Tahiti y sus islas, Te Fare lamanaha . Describe la vida de los polinesios antes de la llegada de los misioneros y su entorno natural tradicional...
• El Museo de la perla. Nos descubre la perla de Tahiti bajo diferentes aspectos: arte, historia, mitología, filosofía y religión.
• El ayuntamiento de Papeete, de estilo colonial, que recupera la arquitectura del palacio de la reina Pomare IV, o los ayuntamientos de Faa y de Arue, ejemplos típicos de la arquitectura polinesia tradicional y colonial.
• El faro de la punta Venus. Construido en 1867 por los mangarevianos para afirmar la vocación marítima de la bahía de Matavai (a esta bahía llagaron la mayoría de los exploradores de la segunda mitad del siglo XVIII) y porque aquí se encuentra la punta bautizada como Venus por el navegante James Cook como recuerdo de su misión de observación del paseo del planeta delante del sol, en 1769. el faro se erige sobre una bellísima y extensa playa de arena negra.El Jardín Botánico Harrisson W. Smith, con especies tropicales variadas.
• El Jardín de Mataoa para descubrir una de las mas bellas colecciones de aves del paraíso de Tahiti y especies vegetales exóticas.
• El Parque Publico Territorial de Papehue Mahana Park con numerosas actividades náuticas (kayaks, etc.).
• El Lagonarium, auténtico observatorio submarino calcado de un entorno natural: peces tropicales, tiburones, morenas, anguilas, tortugas marinas, anémonas de mar...La catedral de Notre-Dame de Papeete, consagrada en 1875 y restaurada en 1987, ofrece una armonía de modernas y antiguas vidrieras, el Templo mormón de Papeete, la iglesia de Saint Michel de Punaauia, la iglesia de Saint Michel de Papara, la iglesia de Saint Michel de Papeete o también el templo chino de Mamao, con el techo en forma de pagoda recubierto de tejas de cerámica.
• El puerto de recreo de Papeete donde amarran los yates de crucero y numerosos veleros...

• Las galerías de arte de Papeete, que exponen las obras de los artistas locales.
• La perla de cultivo en todas sus formas: no montada o engarzada, en keshi, barroca, ovalada o perfectamente redonda, representa el mejor reflejo de las islas (las numerosas tiendas que hay en Tahiti ofrecen una amplia gama de tipos y precios).
• El pareo pintado con vivos colores y con motivos evocadores de Tahiti y sus islas que se pueden encontrar en todas las tiendas y que resultan muy útiles al borde de la laguna.
• Los objetos de artesanía, como los sombreros, los magníficos tifaifai, los collares de conchas, los nácares pulidos o montados en joyas, los bolsos de mano trenzados , los tapa decorados, los dientes de tiburón o las aletas de pez espada...
• Las vainas de vainilla de Tahaa.
• El tatuaje.
• El mercado publico de la ciudad de Papeete es el corazón de la ciudad. Abierto todos los días de 5 a 17 horas (los domingos de 4 a 7 de la mañana), el mercado, de colores tropicales en el que reina un animado ambiente y la hospitalidad polinesia, vive su mayor actividad el domingo por la mañana muy temprano. Por la tarde, hacia las 16.00hr, es el momento ideal para darse una vuelta por allí.

En Tahiti, teniendo en cuenta la diversidad de los estilos culinarios representados, el único problema es la elección. Los grandes hoteles ofrecen a menudo dos tipos de restauración, rápida y gastronómica, y organizan veladas en torno a suculentos buffets, amenizados con espectáculos de danzas en los que actúan los mejores grupos locales. Además, la cocina francesa rivaliza con la cocina china de especialidades cantonesas.

Existen numerosas pizzerías, bares y establecimientos de comida rápida en la aglomeración y en toda la isla.

Otra originalidad tahitiana, las "roulottes", una especia de restaurantes ambulantes, se pueden encontrar por la tarde-noche en la plaza Vaiete. Equipados a veces con mesas y sillas, ofrecen una restauración simple y rápida compuesta por carne asada, platos chinos, pizzas y crêpes a precios moderados.Cocina francesa e internacional:

SAFARIS EN 4X4 Y SENDERISMO

Recorrer Tahiti por el valle de Papenoo es una experiencia que debe realizarse preferentemente con un guía, a pie, en todo terreno p 4X4.

El interior de la isla esta atravesado por una carretera que surca el gran valle de Papenoo, rico en enclaves arqueológicos y parajes espectaculares jalonados de impresionantes cascadas, haya la garganta del Maroto. La carretera desemboca en la salida del túnel del Maroto sobre el famoso lago natural de Vaihiria, antes de volver a bajar hacia la llanura de Mataiea.

El recorrido por la península de Tahiti se puede emprender a pie, preferentemente con guía, debido a algunos pasos muy difíciles en los acantilados de Pari. La ruta comienza habitualmente en barco hasta el lugar donde se encuentran los petroglifos de Vaiote, y continua a pie.La escalada del monte Araiscalade (2066m) se puede realizar sin guía ya que el camino esta asfaltado y hay refugios habilitados. Comienza a 600 m de altitud.

En la cumbre, la vista abarca todas las cimas de la isla, sus profundos valles, la silueta alargada de Moorea y las pequeñas manchas de Tetiaroa y Maiao en el océano, una visión sublime.Situados en la costa rocosa, los lava tubos de Hitiaa, que deben explorarse preferentemente con un guía, en 4X4 y después a pies, son espacios tubulares cerrados o hundidos por las aguas de las filtraciones, que a veces dan nacimiento a cascadas. La exploración de estas galerías subterráneas nos aportan sensaciones intensas, buscadas por los amantes de la espeleológica.